El fenómeno electoral de Parisi: una mirada desde los datos
Introducción
En la primera vuelta de la elección presidencial de 2025, el candidato Franco Parisi obtuvo el 19,7% de los votos válidamente emitidos, un total de 2,55 millones de votos, llegando en tercer lugar después de José Antonio Kast, que obtuvo el 24,6%, y antes de Johannes Kaiser, que sumó el 13,6%.
Fue, sin duda, la sorpresa de la elección, sobre todo porque aumentó de forma significativa su votación respecto de la elección de 2021, cuando obtuvo en la primera vuelta el 12,8%, derrotando esa vez por 1.429 votos al candidato de Chile Vamos, Sebastián Sichel. La segunda sorpresa fue que el Partido de la Gente (PDG) eligió 14 diputados. El candidato Franco Parisi se distinguió por ser el único que, en los debates, llamaba a votar no solo por él, sino también por su partido, el PDG.
El presente documento describe, a partir de datos disponibles, dónde obtuvo Parisi sus votos. Para ello combina datos que están disponibles públicamente, datos comunales y de encuestas, y análisis de Unholster sobre la votación del 16 de noviembre.
Datos de encuestas
De acuerdo con la encuesta del 15 de noviembre, el 73,2% de los votantes de Parisi rechaza al gobierno, comparado con el 57,7% a nivel nacional, y el 69,5% no se declara ni de izquierda ni de derecha, comparado con el 48,2% a nivel nacional. La diferencia más grande entre los votantes de Parisi se observa en quienes se ubican en la centroizquierda: mientras a nivel nacional este grupo corresponde al 18,7%, entre los votantes de Parisi es solo un 1,8%. Es decir, los votantes de Parisi son más críticos del gobierno que el promedio nacional, y una proporción significativamente mayor no se declara en la escala izquierda–derecha, donde toda la diferencia con el promedio nacional proviene del grupo que se define como centroizquierda.
Estos datos se pueden resumir en la frase que usó el candidato presidencial del PDG en el debate del lunes 10 de noviembre antes de la elección, donde dijo: “...ustedes siempre nos llevan al 73”. Franco Parisi fue audaz: comprendió que en Chile emergió un votante sin tribu.
Análisis datos de votaciones
Para entender los votos de Franco Parisi es necesario mirar con detención quiénes son los que votaron por él y, de esa forma, construir un relato que explique las posibles razones por las cuales lo eligieron.
Para ello se realizan dos análisis: por una parte, el modelo de género y edad, y por otra, la matriz de transición entre la primera vuelta de 2021 y la primera vuelta de 2025. Ambos análisis fueron presentados en .
Con el primer análisis queremos entender qué grupos etarios y de género votaron más por Parisi, mientras que con el segundo buscamos identificar principalmente cuántos votantes “obligados” —aquellos que no votaron en la elección de 2021— votaron ahora por Parisi.
Modelo de Género y Edad
En la elección del 2021 fue Gabriel Boric quien capturó el voto de los jóvenes. En la primera vuelta del 21 de noviembre obtuvo un 31% de los votos en los jóvenes menores de 30 años y un 37% del voto femenino. Ahora, sin embargo, fue Parisi quien se llevó más de un tercio de los votos de los jóvenes menores de 35 años: un 38,1% entre los hombres votantes y un 33,2% de las mujeres votantes de ese grupo. La juventud fue, por lejos, el grupo etario que más votó por él entre los grupos analizados.
El porcentaje de personas que votó por Parisi en el grupo de 35 a 54 años corresponde aproximadamente a un tercio de la intención de voto del grupo más joven. En el grupo de más de 54 años, es aún menor.
Este resultado sorprende en el contexto del gobierno del presidente Boric, quien hizo campaña por la eliminación del CAE y estaba tramitando, al momento de la elección, un proyecto que se hacía cargo de esa promesa. Uno hubiera esperado que la candidata del oficialismo, Jeannette Jara, se hubiera beneficiado de este tema y, por lo tanto, obtenido una buena votación entre los jóvenes. Sin embargo, al momento de la elección este proyecto no había sido aprobado y enfrentaba un escenario complejo en el Senado. A su vez, Parisi tampoco hizo campaña respecto de temas específicos de educación superior.
Es necesario buscar otras explicaciones que hayan llevado a tantos jóvenes a votar por Franco Parisi. Una posible explicación puede ser alguno de los enfoques de su programa. Parisi propone fortalecer la formación técnico-profesional mediante un modelo de educación dual articulado con empresas, acompañado de incentivos tributarios para fomentar la empleabilidad juvenil y el vínculo entre estudio y trabajo, más que reformas estructurales al sistema de financiamiento universitario.
Volveremos sobre este punto al analizar la correlación de la votación de Parisi a nivel comunal con los años promedio de educación.
Características sociodemográficas votantes 1era Vuelta
Estos resultados difieren de los obtenidos por Parisi en la primera vuelta de 2021. Recordemos que en esa ocasión las elecciones se realizaron bajo un régimen de voto voluntario. En dicha primera vuelta, como mencionamos previamente, Boric obtuvo la mayor proporción de votos entre las personas menores de 30 años. Tal como detallamos en , el 17% de las mujeres y el 26% de los hombres pertenecientes a ese grupo etario votaron por Franco Parisi.
El mayor apoyo de las personas jóvenes al candidato del PDGi en la primera vuelta de 2025, en comparación con 2021, puede explicarse por la distinta oferta de candidaturas presente en ambos comicios, pero también por la implementación del voto obligatorio. Como se señaló anteriormente, Parisi atrajo una proporción relevante de nuevos votantes, entre los cuales las personas jóvenes constituyen un segmento particularmente significativo.
Modelo de Transición
La matriz de transición de votos entre la primera vuelta del 2021 y la de 2025 muestra que un 37% de quienes no votaron o votaron nulo/blanco en 2021 lo hicieron por Parisi en esta elección. A este grupo se le denomina “votante obligado”, porque lo más probable es que, en la elección de 2025, no habría votado si el voto no hubiera sido obligatorio. Por otro lado, José Antonio Kast obtuvo el voto del 16% de este grupo y Johannes Kaiser un 8,9%.
Parisi captó más del doble de los votos de este grupo comparado con Kast y 4,5 veces los votos que captó Kaiser. Bajo este análisis, Parisi fue el que más votantes obligados atrajo o que decidieron votar por él.
Según el , solo el 37,2% de quienes no votaban antes de 2022 —es decir, los actuales "votantes obligados"— prefiere la democracia a cualquier otra forma de gobierno, en contraste con el 60,6% de los votantes habituales. Esta brecha revela una adhesión significativamente menor al sistema democrático, siendo la diferencia más notable su indiferencia entre un régimen autoritario y uno democrático.
En términos valóricos, los votantes obligados se muestran más conservadores. Según , el 62% está en desacuerdo con el aborto libre, frente al 43% de los habituales, resultados que COES corrobora. Además, el 42% de los obligados se considera moderadamente religioso, comparado con el 31% de los habituales. En materia económica, prefieren la iniciativa privada: el 55% no cambiaría sus fondos a una AFP estatal (frente al 37% de los habituales) y el 72% considera que los servicios básicos deben ser entregados por quien lo haga mejor, sea Estado o privados, versus el 61% de los habituales. Finalmente, según COES, el 50,7% de los votantes obligados tiene poca o ninguna confianza en los mapuches, comparado con el 31,2% de los votantes habituales.
En conclusión, los votantes obligados conforman un electorado más conservador en lo valórico, más pragmático en lo económico y con menor compromiso democrático que los votantes habituales. Su incorporación al padrón electoral representa un cambio sustancial, que en esta oportunidad Parisi supo interpretar de mejor manera.
Transición votos 1era Vuelta 2021 - 2025
Votación del Partido de la Gente
El Partido de la Gente obtuvo 1,27 millones de votos, el 12% de los votos válidamente emitidos en diputados, eligiendo un total de 14 de los 155 diputados. Aunque es la cuarta bancada en términos de pactos, si se observan los partidos, tiene más diputados que RN (13), pero menos que Republicanos (31), Frente Amplio (18) y UDI (17).
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El PDG obtuvo alrededor del 50% de los votos de Parisi. Esta proporción es menor comparada con la de 2021, cuando el PDG obtuvo 539 mil votos y Parisi 899 mil, es decir, un 60%.
De estos simples números queda claro que no todos los votos de Parisi se fueron al PDG. Un análisis de transición entre votación presidencial y de diputados muestra que un 35,6% de quienes votaron por Parisi votaron por el PDG, un 32% votó por la lista del oficialismo (Unidad por Chile), un 17,6% votó nulo/blanco y el resto votó por otras listas, excluyendo Chile Grande y Unido y la lista Cambio por Chile.
Análisis de datos comunales
Para profundizar el análisis, incorporamos correlaciones a nivel comunal entre la votación de Parisi y otras variables, con el objetivo de comprender las diferencias territoriales y los factores que podrían estar influyendo en su apoyo.
Un factor consistente y significativo en todos los modelos es la escolaridad desagregada por género. En el caso de las mujeres, los años de escolaridad presentan un coeficiente de -9,35 (altamente significativo con p<0,01). Esto significa que, en promedio, una comuna donde las mujeres tienen 1 año más de educación tiene una votación menor de Parisi de 9,35 puntos (elasticidad de -4,56), lo que indica que Parisi obtuvo mayores apoyos en territorios con menor promedio de años de escolaridad femenina.
Regresiones progresivas: Franco Parisi
Contrariamente, la escolaridad masculina muestra un efecto positivo (coeficiente +5,29, elasticidad +2,54), sugiriendo que donde los hombres tienen mayor educación formal, Parisi recibe más apoyo.
En cuanto al perfil socioeconómico del electorado de Parisi, este se completa con el análisis de las variables laborales, culturales y de inseguridad. La tasa de empleo masculino actúa positivamente (coeficiente +0,54, elasticidad +0,91), mientras que el empleo femenino tiene un efecto negativo (coeficiente -0,17, elasticidad -0,21), indicando que Parisi concentró votos en comunas donde los hombres estaban empleados, pero las mujeres enfrentaban menor empleo, una característica de territorios con economías menos diversificadas. Esto podría ayudar a entender, en parte, por qué le fue tan bien en el norte.
Adicionalmente, las comunas donde una mayor proporción de la población se declaró, según el Censo 2024, como “Sin religión”, mostraron una menor votación por Parisi (coeficiente -0,16, elasticidad -0,14), revelando que territorios más secularizados votaron menos por él, lo que contrasta con su narrativa de candidato outsider y sugiere que su base electoral era cultural y religiosamente más tradicional. Finalmente, la tasa de homicidios muestra una relación positiva significativa (coeficiente +0,015, elasticidad +0,04), evidenciando que, aunque el efecto es numéricamente pequeño, existe una correlación clara entre inseguridad e intención de voto por Parisi.
¿Qué pasará en la segunda vuelta?
Según la encuesta de Panel Ciudadano publicada el 23 de noviembre, en la segunda vuelta de 2025 un 46% de quienes votaron por Parisi en primera vuelta lo haría por Kast, mientras que un 20% se inclinaría por Jara. Este traspaso de votos difiere de lo observado en la elección de 2021, cuando, bajo voto voluntario, una mayor proporción del electorado de Parisi se volcó hacia Boric en el balotaje.
En aquella segunda vuelta de 2021, la participación aumentó de 47,3% a 55,6%, lo que representó un incremento de poco más de 1,2 millones de votos. Según la matriz de transición, de quienes votaron por Parisi en primera vuelta, un 47,1% apoyó a Boric, un 33,7% a Kast, y el 18,2% restante no votó o anuló su voto. Por su parte, casi la totalidad de los votantes de Gabriel Boric y Yasna Provoste respaldaron a Boric en el balotaje. Una tendencia similar se observó en el electorado de derecha: los votantes de Kast y Sichel se volcaron mayoritariamente hacia Kast.
Transición votos 1era Vuelta 2021 - 2025
Esta potencial diferencia entre lo ocurrido en 2021 y lo que podría suceder en 2025 se explicaría por la presencia de los votantes obligados. Como se mostró anteriormente, este segmento rechaza en mayor proporción al gobierno, presenta actitudes más conservadoras y, en la escala izquierda-derecha, una menor proporción se ubica en la centroizquierda.
Conclusiones
Franco Parisi consolidó su votación sorpresiva en 2025 mediante una combinación única de factores actitudinales, demográficos y territoriales. A nivel agregado, el 73,2% de sus votantes rechaza el gobierno y el 69,5% no se identifica con la izquierda ni la derecha, confirmando que capitalizó exitosamente la demanda por ruptura política.
Demográficamente, capturó más de un tercio de los jóvenes menores de 35 años (38,1% de los hombres; 33,1% de las mujeres) y fue particularmente exitoso movilizando votantes obligados: un 37% de quienes no votaron en 2021 votaron por Parisi en 2025, cifra que duplica la de Kast (16%) y cuadruplica la de Kaiser (8,9%). Sin embargo, solo el 35,6% de quienes lo apoyaron en la presidencial votó por el PDG en diputados, revelando una débil institucionalización de su base electoral: es un voto más por la persona que por el partido.
Territorialmente, la distribución del voto de Parisi sigue un patrón socioeconómico muy definido. Un factor determinante es la escolaridad femenina (coeficiente -9,35; elasticidad -4,56): por cada año adicional de educación de las mujeres en una comuna, Parisi pierde 9,35 puntos porcentuales. En contraste, una mayor escolaridad masculina (coeficiente +5,29; elasticidad +2,54) se asocia con más apoyo al candidato. Este patrón se complementa con una estructura laboral tradicional (empleo masculino +0,91; empleo femenino -0,21), menor secularización (sin religión -0,14) e inseguridad elevada (homicidios +0,04). En conjunto, estos factores describen comunas con baja educación femenina, economías tradicionales, baja participación laboral de las mujeres, mayor tradición religiosa y altos niveles de violencia.
En síntesis, Franco Parisi supo interpretar al joven que se vio obligado a votar, que rechaza al gobierno, que vive en comunas populares, donde hay más oportunidades laborales para hombres que mujeres y que cree en alguna religión, y probablemente vive en comunas con más inseguridad.